Carlos Puig: un periodista-periodista

Carlos Puig

Fanático de las cumbias, la caricatura Don Gato y la serie Los Soprano, Carlos Puig se ha consolidado como una de las figuras más importantes de la radio mexicana desde su polémica entrada en el programa Hoy por Hoy, de W Radio, en 2008.

Multimediático como sus compañeros, Puig ha tenido una carrera que va mucho más allá de la radio o la prensa escrita. Comenzó su carrera de periodista en 1984, el programa de Canal Once, «Hoy en la Cultura». Ahí, Francisco Taibo lo invitó a colaborar en el suplemento de Siempre!. Simultáneamente, Puig colaboraba en la revista Proceso, y pocos meses después comenzó lo que sería una importante carrera en Estados Unidos, Proceso lo mandó a Washington como su corresponsal.  En esos días ya estaba en Proceso corrigiendo galeras desde 1984 y después fui reportero y corresponsal en Washington.

Durante su estancia en la capital norteamericana, Puig recibió la noticia del asesinato del entonces candidato a la presidencia, Luis D. Colosio, lo que lo impactó fuertemente. Además, como parte de sus experiencias profesionales, visitó la legendaria cárcel de Guantánamo (Cuba), donde aún se practicaban terribles torturas contra los prisioneros.  Ha tenido la oportunidad de aprender de maestros del periodismo como Julio Scherer, Vicente Leñero, Carlos Marín, Taibo II, Rafael Rodríguez Castañeda y Ciro Gómez Leyva.

Revista Proceso

Avanzando en su carrera, Puig entró al programa “Séptimo Día”, de CNI y Canal 40 y “Fórmula de la tarde”, de la empresa Radio Fórmula. Esta experiencia en la radio, más tarde, lo llevó a confusiones y “metidas de pata”, como la que relata en entrevista para etcétera.com: “Un día en W Radio entrevistaba a Andrés Manuel López Obrador, y mandé a corte diciendo ‘aquí en Radio Fórmula somos muy disciplinados y hacemos los cortes comerciales’ y Andrés Manuel me corrigió y me dijo: ‘No Carlos no estamos en Radio Fórmula estamos en W Radio’”. Personalmente, creo que esto puede ser interpretado como lo poco que las empresas realmente han logrado moldear a Carlos Puig. Tan no siente que se imponga cierto criterio, o que una empresa sea tan diferente de la otra, que se confunde en vivo, entrevistando a una de las figuras más famosas de la política mexicana.

En 2008, después de la muy polémica salida de Carmen Aristegui del programa Hoy por hoy, el 17 de abril, a las 6 de la mañana en punto, se escuchó la voz de Puig al rescate. Silenciando a todas aquellas personas que demandaban el regreso de Aristegui, Puig ha demostrado saber ser un periodista de los buenos, aunque por supuesto, como todos ha tenido pequeños resbalones al intentar denunciar a ciertos políticos.

Dirigió un periódico español en Houston (Texas) llamado «Rumbo», es reportero y corresponsal de excelencia e integrante de la junta directiva de la revista Proceso.

Puig se ha sabido separar de los demás periodistas, tratando de despojarse de los vicios del periodismo en los que fácilmente se cae hoy en día, siendo el principal el exceso de “crueldad” hacia los políticos. Puig ha sabido escuchar y ha propiciado un espacio de reflexión e información pura en los medios de comunicación mexicanos. “Creo que [al periodismo mexicano] le falta apostar por más información y dejar de apostar por la opinión.”, declaró en entrevista para Etcétera.

Rompiendo las Olas, la película favorita de Puig

Al igual que a su colega Denise Maerker, le gustaría entrevistar a algún capo del narco mexicano. Su película favorita es Rompiendo las Olas, de Lars Von Trier. Le gustaría que lo recordaran como buen padre, buen esposo y buen amigo.

En palabras de Ciro Gomez Leyva «Puig es un periodista-periodista, cuyos méritos, honestidad intelectual y compromiso con los códigos esenciales del oficio no están en duda.»